Los patrones de producción y consumo de plásticos en toda Europa siguen siendo insostenibles y es necesario volverlos más circulares para reducir los residuos, la contaminación, el cambio climático y otros impactos negativos en el medio ambiente, según un nuevo informe de la Agencia Europea de Medio Ambiente (AEMA). El documento destaca la introducción de una nueva herramienta de seguimiento para comprobar el progreso en la circularidad de los plásticos en Europa.
El Laboratorio de Métricas de Circularidad de la AEMA abarca una amplia gama de métricas sobre la transición a una economía circular. Esta iniciativa aborda los patrones insostenibles de producción y consumo de plásticos, que contribuyen significativamente a los residuos, la contaminación, el cambio climático y otros impactos ambientales.
La herramienta de seguimiento, que es uno de los módulos temáticos del Laboratorio de Métricas de Circularidad más amplio, analiza los avances realizados en la circularidad de los plásticos en toda Europa. Proporciona información detallada sobre la circularidad de los plásticos, con información técnica para los responsables políticos, las partes interesadas y el público. El módulo se actualizará anualmente con los datos más recientes y los nuevos flujos de datos a medida que surjan.
Junto con la herramienta, el informe de AEMA El papel de los plásticos en la economía circular de Europa indica que se prevé que el consumo de plásticos aumente tanto en Europa como a nivel mundial. El informe recopila datos de diversas fuentes para evaluar el estado actual de la producción y el consumo de plásticos, y sus repercusiones ambientales y climáticas. También explora estrategias para la transición de Europa hacia una economía circular para los plásticos.
El módulo temático sobre plásticos apoya la contribución de la Unión Europea a los esfuerzos internacionales para frenar la contaminación plástica. El Comité de Negociación Internacional (INC) de las Naciones Unidas está elaborando un acuerdo internacional jurídicamente vinculante para eliminar la contaminación plástica, incluida la contaminación marina.
El consumo de plástico en Europa es elevado y se espera que crezca en consonancia con los aumentos previstos en la producción mundial de plásticos. Además, el consumo y la producción de plásticos afectan negativamente al medio ambiente y contribuyen al cambio climático.
Cada vez más basura marina llega a las playas de Europa, altos niveles de microplásticos están ingresando al medio ambiente y el crecimiento futuro del consumo de plástico significa que, como resultado, es probable que aumenten las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) de la cadena de valor.
La circularidad del material plástico está aumentando a un ritmo lento. Sin embargo, hay tendencias alentadoras: la capacidad de reciclaje mecánico está aumentando, las exportaciones de residuos plásticos de la UE están disminuyendo, la capacidad de producción de bioplásticos está creciendo lentamente, al igual que el uso de plásticos reciclados.
Desarrollar una economía circular es fundamental para hacer que los plásticos sean más sostenibles y es un objetivo central de la Unión Europea en su estrategia plástica y su legislación reciente relacionada con los plásticos y es parte de las negociaciones del tratado de la ONU para poner fin a la contaminación plástica.